En la madrugada del primero de enero, personal policial tomó conocimiento de una fiesta clandestina, donde una vez en el lugar observan aproximadamente 50 vehículos sobre la calle y al llegar a la vivienda particular en dónde se estaría realizando el evento, se visualiza aproximadamente unas 600 personas reunidas al aire libre consumiendo bebidas alcohólicas, bailando y con la música a alta intensidad, al notar la presencia policial estos apagan la música y empiezan a dispersarse las personas del lugar como así también a retirarse en los vehículo. Donde los efectivos procedieron a identificar a los dueños de la vivienda, siendo un varón de 24 años y una mujer de 22 años, como así también a varios testigos quienes informar que se habrían enterado del evento mediante redes sociales, una vez que se retiraron se procede a la entrega del procedimiento. Interviene la Fiscalía de Cosquín a cargo de la Dra. Paula Kelm.
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