La Justicia de Brasil autorizó la exhumación de Alf…

La Justicia de Brasil autorizó la exhumación del exdictador paraguayo Alfredo Stroessner sepultado en Brasilia en 2006. La resolución fue tomada por el Superior Tribunal de Justicia (STJ) en respuesta a una acción presentada por el paraguayo Enrique Alfredo Fleitas que dice ser hijo del general. Además, Fleitas reclama una herencia que se calcula en unos 20 millones de dólares. La exhumación fue aceptada por la hija y única heredera de Stroessner
, Graciela Concepción Stroessner Mora.

El solicitante de la exhumación es hijo de Michele Fleitas, madre de otras dos hijas del militar, producto de una relación que, de acuerdo a algunos de sus biógrafos, ocurrió en la década de 1970. El fallo judicial establece que se deben realizar todas las pruebas de ADN necesarias. Pero aclara que la exhumación sólo será realizada cuando las autoridades del cementerio den el aval en virtud de la actual pandemia del coronavirus.

Stroessner murió a los 93 años, el 16 de agosto de 2006, en Brasilia, donde vivió en el exilio y el ostracismo político desde febrero de 1989, cuando cayó el régimen que había presidido con puño de hierro desde 1954. Hijo de un emigrante alemán y de una campesina paraguaya, se hizo con el poder a los 41 años, tras un golpe militar. Amoldó la Constitución y las leyes a sus intereses y consiguió que lo reeligieran cada cinco años, siempre en votaciones fraudulentas. Su régimen se caracterizó por la corrupción, la represión y la violencia estatal. La comisión de la Verdad y Justicia de Paraguay determinó que unas 20.000 personas fueron torturadas y 423 «desaparecidas» durante su dictadura.

En 1945, Stroessner se casó con Eligia Mora, con quien tuvo tres hijos. Graciela Concepción, la única de los tres con vida, tiene 74 años y viven en Paraguay. Durante toda su vida se le conocieron numerosas amantes al militar paraguayo. Entre ellas María Estela Legal, «La Ñata», con quien tuvo dos hijas. En 2016 la mujer dio detalles de la relación en una entrevista para la televisión paraguaya. Allí contó que el romance había iniciado en los años 70, cuando lo conoció a través de un familiar. El día de su muerte Legal concurrió al funeral que se realizó en Brasilia. Hasta ese momento había mantenido en secreto la relación, pero a partir de allí estableció contactos con la familiar oficial para negociar la herencia del dictador.