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El protocolo fue estricto. El clásico de Porto Alegre se jugó en medio de un gran operativo que se desplegó con el fin de respetar a rajatabla todas las medidas de sanidad establecidas para prevenir y evitar la propagación del coronavirus.
Renato Portaluppi, técnico de Gremio, se sacó el barbijo para dar indicaciones. (Foto: Reuters)
El encuentro fue por la cuarta fecha de la segunda fase del Campeonato Gaúcho y Gremio se impuso a Inter por 1-0 a Inter en el estadio Centenario de Caxías Do Sul. No hubo público, aunque sí pantallas que mostraron imagenes de la hinchada del Inter y parlantes para alentar al equipo.
Hubo pantallas que proyectaron imágenes de la hinchada de Inter. (Reuters)
Los técnicos de ambos equipos, Renato Portaluppi y Eduardo Coudet, permanecieron con barbijos y sólo se los quitaron para dar indicaciones. Antes de ingresar a los vestuarios, a los jugadores les tomaron la temperatura. Los micros que trasladaron a ambos planteles fueron desinfectados mientras se jugaba el partido.
Algunos hinchas vieron el partido desde propiedades linderas y con barbijos. (Reuters)
El clásico se disputó a puertas cerradas, pero hubo pantallas que proyectaron imagenes de la hinchada de Inter y parlantes para alentar a los futbolistas. Algunos fanáticos lograron ver el encuentro desde los balcones y ventanas de propiedades linderas al pequeño estadio en el que se jugó. El derby dejó unas cuantas postales inusuales.
Los micros de los planteles fueron desinfectados. (Reuters)
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