«No va a haber baja en los combustibles» | Por el a…

«La caída del precio del petróleo a nivel internacional no puede tener incidencia en los  combustibles internamente, porque el gobierno hizo un acuerdo con las petroleras para fijarle el precio al crudo para refinación en 50 dólares, para lo que se denominó barril criollo», explicó Julio Alonso, presidente de la Federación de Entidades de Combustibles de la República Argentina (Fecra), ante la consulta de Página 12. De ese modo, el precio en surtidores quedó desvinculado de las oscilaciones del precio internacional, que hoy están en un piso histórico. 

«De todos modos, un barril de petroleo que salga 17 dólares en el mundo (fue el valor mínimo que llegó a tocar el crudo Brent en las operaciones de este martes) es la peor noticia para el país, porque Vaca Muerta termina de morir», sentenció, en referencia a la muy rica, potencialmente, formación en el subsuelo de Neuquén cuyos crudos deben extraerse por métodos no convencionales. «Nadie puede perforar para extraer a estos valores del petróleo, porque el costo de llevar a superficie un crudo que se encuentra entre las piedras es varias veces superior al precio actual en el mundo», justificó su definición anterior Alonso, para quien la situación del sector está reclamando pensar, post pandemia, una redefinición profunda de los precios y la distribución de recursos en el sector. «Hay que barajar y dar de nuevo», se sinceró el titular de Fecra. 

«No se puede seguir manejando el criterio de que un litro de combustible debe valer un dólar; no es posible que el sector siga funcionando con estaciones de servicio con un margen tan estrecho de utilidades, ni se puede pensar que los sueldos de los trabajadores del expendio de combustibles sean la variable de ajuste para que una estacion de servicio funcione», disparó Julio Alonso, que además desmintió las versiones que indican que haya suspensiones de personal en el sector. 

«Hoy no se puede suspender a nadie, existe un decreto del gobierno que impide las suspensiones y despidos y lo vamos a respetar, porque es lo que corresponde pero, además, por una cuestión ética no se puede dejar a nadie sin trabajo en un momento como éste», señaló el titular de Fecra. «Nosotros estamos en todo el país y le aseguro que, aunque estemos a un 30 por ciento del volumen de ventas que podríamos considerar normal, no hay ninguna situación de suspensiones ni despidos». 

Apuntó que el sector de expendedores logró, por una gestión que tuvo el acompañamiento del gremio de trabajadores del rubro (que encabeza Carlos Acuña, co-secretario general de la CGT), ser incluidos entre las actividades afectadas por las medidas de aislamiento social obligatorio. «Logramos los beneficios que se dieron por decreto a todas las actividades afectadas: pago de parte de los salarios con un subsidio del Estado, prórroga de las cargas sociales y una línea de crédito de hasta un 25% de la última facturación anual, hasta marzo de este año», repasó Alonso.

El dirigente empresario de los expendedores reiteró que «no hay ni habrá despidos ni suspensiones en el sector», recordando además que existe una cláusula en la ley de contrato de trabajo (artículo 263 bis) por la cual empresarios y sindicatos podrían, ante una situación de emergencia, acordar una baja salarial temporaria (por 90 días) para evitar las suspensiones. Conforme a la ayuda que obtuvo el sector de las medidas de emergencia y de acuerdo a lo conversado con el gremio, hasta aquí no se plantea siquiera recurrir a esa cláusula. El futuro del sector pospandemia, en cambio, requerirá un tratamiento más profundo, volvió a recordar Alonso al finalizar el diálogo.